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Historia

1000 millones de fresas más tarde

Poco se hubieran esperado los hermanos Ernst y Otto Busch que, un siglo después, el rendimiento de su empresa Zahnbohrerfabrik Busch & Co. fundada en 1905 en Düsseldorf se podría resumir así.

Solo pretendían dar un impulso a la odontología que se encontraba todavía en sus inicios (por aquel entonces solo había 500 dentistas en toda Alemania) mediante el suministro de mejores instrumentos. Ellos y las dos generaciones siguientes de BUSCH lo lograron muy bien, ya que toda la historia de la empresa, trasladada en 1908 a Engelskirchen, quedó marcada por la constante adaptación al estado más reciente de la técnica.

Porque las nuevas familias de productos, tales como:

  • abrasivos con ligazón cerámica
  • la primera fresa dental de carburo de tungsteno de Alemania
  • instrumentos diamantados

fueron las piedras angulares para la evolución posterior.

Estos pasos fundamentales para la innovación sobre la base de materiales de corte novedosos llevaron a la creación de miles de nuevos productos que, mirándolo objetivamente, fueron quitando sucesivamente una parte del temor a la visita al dentista.

Sin embargo, de los conocimientos técnicos adquiridos también se sacó un beneficio para otros usuarios que se dieron cuenta rápidamente de la alta calidad de los productos dentales de BUSCH; sobre todo orfebres, engastadores y podólogos se convirtieron en auténticos fans e inspiraron a Busch & Co. numerosas innovaciones para los productos premium que se fabrican en la actualidad en Engelskirchen con la ayuda de alta tecnología y se exportan a cerca de 100 países.

Compra de una planta siderúrgica abandonada en Engelskirchen

A propósito de Engelskirchen: probablemente fue el espíritu del lugar el que atrajo a los dos hermanos al valle Aggertal, pero tal vez también la fuerza hidráulica disponible en la antigua planta siderúrgica abandonada que compraron, o el cuñado adinerado afincado en la localidad vecina de Ründeroth que participó inicialmente en la financiación; sea como sea, el beneficio para las personas y la localidad de Engelskirchen no solo surgió del objeto empresarial de esta nueva y, en su momento, prácticamente única fábrica.

Mientras Busch & Co. llegaba a ocupar hasta 180 personas, también empleados antiguos que habían adquirido su preparación profesional en Busch se independizaron y fundaron sus propias empresas que, por su parte, dieron trabajo hasta a 1000 personas más. Estas empresas no solo se dedicaron a fabricar fresas dentales, sino también a actividades afines, tales como la fabricación de herramientas de fresado y rectificado o de brocas espiral. Incluso una empresa de moldeo por inyección de plásticos de una antigua empleada resurgió como un fénix de sus cenizas y obtuvo pedidos de Busch.

El inicio de la 2.ª Guerra Mundial puso fin a esta coyuntura especial de Engelskirchen.

Sin embargo, muchas de aquellas empresas siguen existiendo en la actualidad, formando una base estable para la industria local.

2.ª generación de BUSCH

Tuvo que afrontar, por un lado, las consecuencias de la 2.ª Guerra Mundial, por ejemplo la escasez de materiales y los desmantelamientos; pero por el otro lado logró pronto, como primera empresa dental de Alemania, fabricar fresas dentales de carburo de tungsteno.

Este fue el requisito para proporcionar a la medicina dental instrumentos apropiados que soportaran las solicitaciones que ejercen los accionamientos de alta velocidad. Se trató de un auténtico acto pionero que marcó un hito que perdura hasta nuestros días y para el futuro.

Sin mencionar detalladamente los innumerables productos innovadores, la

3.ª generación de BUSCH

se encargó de desarrollar y ampliar la fabricación de instrumentos diamantados sobre la base de la nueva tecnología.

De esta manera se crearon los fundamentos para poder ofrecer a una clientela muy variada, más allá de los límites del mercado dental, un programa completo de instrumentos premium.

La historia y el presente demuestran que en la empresa, que se encuentra actualmente bajo la dirección de Gert Busch, se toman decisiones empresariales que siempre están orientadas al beneficio para los usuarios finales.

En este contexto tampoco se olvida el fomento de proyectos a largo plazo ajenos a la empresa. Así, Busch apoya a organisationes humanitaros como, p. ej., Deutsche Welthungerhilfe, Deutsche Krebshilfe, el cuerpo de bomberos voluntarios de Engelskirchen, Kölner Rundschau Altenhilfe.

Fuente: diversas publicaciones en la prensa